Pero, por supuesto, no el que tomas por las mañanas.
Se trata de agarrar una cucharadita de café instantáneo, unas cuantas gotas de leche hasta formar una pasta, y masajear tus labios con ella.
El café es un emoliente suave en su estado instantáneo y también hidratante, al igual que la leche. De modo que aquí tienes otra forma de tener una suave exfoliación con hidratación extra.
Puedes hacer lo mismo que con la receta anterior, masajearlo 5 minutos y dejarlo 5 minutos más para que la leche se absorba, así´sacas el mayor provecho. Luego, enjuagas con agua.